plátano-mango | planta frutal injertada

Agotado

Los árboles de mango son VIP tropicales que alcanzan alturas impresionantes y tienen hojas brillantes y perennes. Sus pequeñas y fragantes flores de color blanco rosado atraen a los polinizadores. La fruta, con su piel lisa de color verde a amarillo, revela una pulpa de color naranja dorado brillante cuando se corta. Dulce, jugoso y un poco como un paraíso tropical, como un trozo de sol.

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Cuidar un árbol de mango es como cuidar un reino frutal. Aquí podrás descubrir todo lo que necesitas saber:

  1. Riego: Mantener la tierra constantemente húmeda, especialmente durante los períodos secos. Sin embargo, no les gustan los pies mojados, por lo que un buen drenaje es crucial.
  2. Amor por el sol: Los mangos son adoradores del sol. Dales plena luz solar para que prosperen.
  3. Frenesí de alimentación: Fertilice regularmente durante la temporada de crecimiento (primavera y verano). Aprecian un fertilizante equilibrado.
  4. Magia de la poda: Cortar las ramas dándoles forma y controlar su tamaño. Esto también ayuda con la circulación del aire y la producción de fruta.
  5. Control de plagas: Esté atento a las plagas y enfermedades. Trate cualquier problema rápidamente para mantener sus mangos saludables.
  6. Acolchado: una capa acogedora de mantillo alrededor del suelo ayuda a retener la humedad y mantener el suelo fresco.
  7. Paciencia, joven saltamontes: los mangos tardan un tiempo en dar frutos. Ten paciencia y tu árbol de mango te recompensará con una abundancia de deliciosas frutas.